El día 17 de febrero el arzobispo de Westminster, el cardenal Vincent Gerard Nichols, consagró Inglaterra y Gales al Inmaculado Corazón de María, en presencia de más de 3000 fieles, que abarrotaron la catedral de la Preciosísima Sangre de Cristo y llenaron buena parte de la plaza adyacente. Con esta consagración Mons. Nichols renovaba el acto realizado en 1948 por su predecesor, el cardenal Bernard Griffin, inspirado en las peticiones hechas por la Virgen en Fátima.

Como gesto simbólico, el cardenal coronó a la imagen peregrina de María procedente del Santuario de Fátima diciendo: “A ti y a tu Inmaculado Corazón, en este año del centenario de las apariciones de Fátima, nos re-consagramos en unión no sólo con la Iglesia, Cuerpo Místico de tu Hijo, sino también con el mundo entero”.

Tras la ceremonia, la imagen permaneció en el templo hasta el final del día para ser venerada por los fieles y, a continuación, dio comienzo a su recorrido por veinte catedrales de Inglaterra y de Gales, que concluirá en octubre en la diócesis de Wrexham.