Pese a la suspensión de las misas en Italia para evitar la rápida propagación del Coronavirus (Covid-19), la fe de los católicos no decae, convirtiéndose incluso en el “arma” espiritual a la que muchos han acudido para abatir la enfermedad.

 

Cristo de Castelvecchio.

Confiando en que Dios responde ante las súplicas de sus hijos, dos templos italianos han decidido exponer dos crucifijos milagrosos para hacer frente al contagioso mal. Se trata del Cristo de Castelvecchio en Toscana, y del Crucifijo de Casalmaggione en Lombardía, regiones ampliamente afectadas por la enfermedad.

 

El primero de ellos fue expuesto temporalmente y de manera extraordinaria por solicitud del Obispo de San Miniato, Mons. Andrea Migliavacca, incluso antes de que se decretara la suspensión de las misas en los templos del país europeo.

 

La exposición tuvo lugar en la Iglesia de San Domenico en San Miniato desde el Miércoles de Ceniza hasta el primer domingo de Cuaresma, es decir, del 26 de febrero al 1 de marzo, convocando a los fieles a orar ante Jesús Crucificado; una imagen de madera del siglo XI que dicen fue abandonada por dos viajeros en la localidad italiana y que tuvo un lugar importante para los fieles católicos entre los años 1628 y 1631, cuando una plaga azotó la región. Aquel entonces los habitantes acudieron al Crucifijo, que los salvó del mal, y realizaron el voto, fruto del cual se construyó un templo en su honor.

 

La segunda imagen, el Cristo Crucificado de Casalmaggione en Lombardía, está en región de Italia con mayor número de casos de infectados por Coronavirus.

 

Allí, en la Diócesis de Cremona se ha colocado en la entrada de la Catedral de Santo Stefano un antiguo crucifijo que data del 1676, que ya custodió a la ciudad cuando enfrentó las inundaciones del río Po; y hoy se encuentra a la vista de todos gracias a la disposición del vicario, el Padre Arrigo Durati.

 

Cristo Crucificado de Casalmaggione en Lombardía.

“El crucifijo está siempre expuesto en la Catedral de Casalmaggionre, generalmente a la derecha. En estos días, por solicitud del vicario, lo he expuesto en el centro, un poco para marcar el tiempo fuerte de la Cuaresma, y otro poco porque ahora, que no es posible celebrar la Eucaristía con el pueblo por las disposiciones contra el Coronavirus, es importante poner en comunión a la gente con el Señor”, ha indicado el Padre Claudio Rubagotti, párroco del lugar, quien es citado por Il Timone.

 

Oración al Señor ante la epidemia del Coronavirus

 

La diócesis de San Miniato también ha publicado una oración para que los católicos, que ahora se ven impedidos de participar en las celebraciones religiosas, puedan unirse a través de la oración, pidiendo a Dios su auxilio ante la epidemia.

 

Estamos ante ti Señor

con toda nuestra fragilidad. A ti que eres el Resucitado, Señor de la vida, el que conquistó la muerte, nos volvemos en este tiempo de epidemia.

 

Escucha nuestra oración:

sé apoyo para los enfermos, orientación y fortaleza de médicos y profesionales de la salud, consolación para los que se encuentran en luto, misericordia para los que mueren, esperanza y salud para todos nosotros.

 

Te pedimos que nos protejas de la enfermedad,

que nos sostengas con fortaleza en la fe, y alimentes en nosotros el fuego de la caridad y la solidaridad.

 

Líbranos pronto de estos días de peligro y sacrificio,

ayúdanos a vislumbrar pronto la luz y la alegría del monte de la Transfiguración y del día de Pascua.

 

Eres nuestra santidad y salvación,

eres fortaleza y consuelo, eres vida y amor.

 

Que María, tuya y nuestra Madre,

interceda por nosotros y nos cuide en la salud, en la paz y en la fe. Amén.

 

Con información de Il Timone y Diocesi di San Miniato.