Mons. João Scognamiglio Clá Dias rezando ante la imagen de María Auxiliadora de la Casa de Formación Thabor, Caieiras (Brasil)
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Dirijamos nuestra mirada a la Santísima Virgen, Auxilio de los cristianos, que en todo momento intercede por nosotros ante su divino Hijo. Todos los dones que hemos recibido nos han sido conseguidos por su mediación. Ahora bien, “Ella no puede ser la Señora de las obras inacabadas. Ella es la Señora de las construcciones terminadas, de las grandes obras llevadas a término”, afirma con unción el Prof. Plinio Corrêa de Oliveira. A nosotros nos toca, por lo tanto, abandonarnos en los maternales cuidados de la Virgen María, seguros de que Ella misma se encargará de conducir a la plenitud la osada empresa de hacernos perfectos, como el Padre celestial es perfecto (cf. Mt 5, 48).
Mons. João Scognamiglio Clá Dias