Filipinas es una nación que valora de manera notable la devoción popular, que se expresa en grandes celebraciones religiosas a lo largo de todo el territorio. Numerosas advocaciones de la Santísima Virgen son veneradas por millones de fieles y algunas de ellas convocan multitudinarias procesiones y fiestas que se cuentan entre las más grandes del mundo. A estas devociones se suma un vivo aprecio por la figura del Papa, especialmente la memoria de San Juan Pablo II, en cuya visita al país en 1995 se registró la Eucaristía más multitudinaria del mundo, con cuatro millones de asistentes. Hoy, una exhibición gratuita une estos importantes afectos del catolicismo filipino bajo el título "María y los Papas".
La exposición cuenta con numerosas advocaciones de la Santísima Virgen, que corresponden a réplicas de las imágenes más veneradas en los templos del país. Estas imágenes se acompañan con reliquias de San Juan Pablo II y San Juan XXIII y numerosos objetos relacionados a los más recientes Pontífices. Medallas, solideos, casullas, libros y fotografías autografiadas, entre otros, componen la segunda parte de la exhibición que se presenta en el Pabellón Sur del SM Mall of Asia en Ciudad de Pasay, Filipinas.
"Estamos haciendo esto para que el público conozca cuán marianos son los Papas y también como una preparación para la próxima visita apostólica del Papa Francisco", comentó Ray Isabela, coordinador religioso de Veritas Radio, organización responsable del evento. Cada objeto dispuesto cuenta con una breve explicación y en el caso de las advocaciones se relata la historia y el significado de la imagen. También se destaca la devoción mariana de los Pontífices pasados y presentes. "Nosotros ya sabemos cuán profundamente devoto era San Juan Pablo II de Nuestra Señora de Fátima. Pero ¿qué hay de los otros Papas?", cuestionó Isabela para motivar la asistencia de los fieles.
La relación entre los Papas, la Santísima Virgen y el pueblo de Filipinas se expresa de forma especial en dos de las réplicas exhibidas en la exposición. Se trata de Nuestra Señora de Peñafrancia y Nuestra Señora de la Soledad de Porta Vaga, las cuales recibieron la Coronación Canónica Pontificia en 1924 y 1978. Con esta especial distinción los Papas reconocen el gran valor de una advocación mariana, la extendida devoción que suscita en el pueblo cristiano y avalan la extensión de su culto y los numerosos favores que la Santísima Virgen ha concedido a sus devotos .
La exhibición "María y los Papas" estará abierta al público hasta el día 28 de septiembre.
Con información de CBCP News.
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