
El Dr. Steven Collins, profesor de Estudios Bíblicos y Apologética de la Trinity Southwest University, del estado norteamericano de Nuevo México, anunció en medios académicos que muy probablemente ha encontrado de forma inesperada la ciudad bíblica de Sodoma:
“El área estaba en blanco, o casi, en la mayor parte de los mapas arqueológicos. Pero lo que allí encontramos fue una gran ciudad estado, prácticamente desconocida para los especialistas”.
Desde el 2005, el Dr. Collins y su equipo han desarrollado sus investigaciones en el área de Tall el-Hammam, situada entre el mar Muerto y la ciudad jordana de Naour. Sus trabajos desvelan “un verdadero tesoro de estructuras monumentales antiguas”, entre ellas una muralla de 5,2 metros de espesor y casi 10 metros de altura.
En declaraciones publicadas por la revista Popular Archaeology, el Dr. Collins afirma que dicha área “cumple al parecer todos los requisitos del texto bíblico necesarios para que sea considerada la ciudad de Sodoma”.
Y añade: “La identificación de Tall el-Hammam con Sodoma parece evidente, ya que es al menos entre cinco y diez veces mayor que cualquier otro sitio arqueológico de la Edad de Bronce en toda la región”.
En algún momento entre los años 2000 y 1540 a. C. la ciudad desapareció súbitamente. Una capa de cenizas, fragmentos de alfarería con signos de haber sido sometidos a temperaturas extremadamente altas y marcas de un incendio en las paredes de un palacio sugieren la existencia de una gran explosión. Hershel Shanks, editor de la Biblical Archaeology Review, afirmó al Huffington Post: “Las cuestiones teológicas no están sujetas a demostraciones científicas. Pero el que escribió el texto bíblico tenía en mente algún sitio concreto cuando dijo que Dios destruyó Sodoma. Y Tall el-Hammam es un excelente candidato”.
Tomado de la Revista Heraldos del Evangelio n°150; pp. 40