
Conforme publica el Catholic Philly, en agosto de este año, ya eran doce las diócesis estadounidenses que han implantado el Catholic Curriculum Standards en sus escuelas, lo que hace un total de 390 centros de enseñanza, con 119 258 niños instruidos según tales criterios, cuyo objetivo es promover y defender una educación católica integral.
Fueron propuestos hace menos de un año por la Cardinal Newman Society, e incluyen la participación en la Santa Misa varias veces a la semana, como parte del programa escolar, la recitación de poemas clásicos y la enseñanza del latín desde pre-escolar.
“Es necesario enseñar la virtud en cada lección, porque lo que los niños estudian es importante para ellos, no están únicamente leyendo un libro”, comentó la directora de una de las escuelas.
En las instituciones que aplican el método de enseñanza, el número de estudiantes ha aumentado, hasta el punto de duplicarse en algunas de ellas.